el blog de reseñas de Andrés Accorsi

viernes, 8 de octubre de 2010

08/ 10: EL LIBRO


El Libro es una historia extraña, más parecida a un cuento de Borges que a las típicas historietas de Carlos Sampayo y José Muñoz. La trama gira en torno a un libro, o en realidad a un ejemplar de un libro. Un ejemplar de Novela de Ajedrez, de Stefan Zweig (edición alemana) al que nuestros queridos amigos los Villanos Nazis (hacía bastante que no aparecían, no?) le cosieron una página extra con contenidos secretos, que le dan un ribete de espionaje a una novela gráfica que, de otra manera, se quedaría en un discurrir más bien costumbrista, o de drama urbano tipo Yoshihiro Tatsumi.
El protagonista, un argentino ya anciano llamado Huergo, repasa el periplo del libro desde 1942 hasta 2002. El tramo más interesante es, lejos, el primero, el que nos cuenta cómo el libro llega a Argentina en 1942. Pero nos lo cuenta de modo raro, como suele hacer Sampayo, como disfrazando ese evento crucial entre una miríada de elementos sumamente interesantes, a los que les presta más atención. Los negocios de Otto Schmelling, su relación con los nazis y con los peones argentinos a los que contrata dan muchísimo jugo y arman –literalmente- el bosque en el que Sampayo esconde el árbol, o en realidad la llegada del libro.
Una vez terminado ese flashback cobra verdadero protagonismo Huergo, fanático (como Borges) de los libros y del ajedrez, al que vemos perder su bibiloteca a manos de su inescrupuloso socio y –ya sin sus libros ni su ajedrez- precipitarse en caída libre hasta que la nueva oportunidad le llega en los brazos de una mujer.
La historia hace bastante hincapié en la vida cotidiana de Huergo sobre todo durante la década del ´50 y ´60 y ahí los autores se lucen con una reconstrucción impecable del típico barrio porteño de clase media. Le siguen más flashbacks, un breve paso por 1977 (en el que se remata brevemente una de las puntas abiertas, la de Annemarie, la joven fanática del ajedrez) y un salto final al presente, a 2002, en el que la crisis pega con todo y Huergo presencia cómo su ex-socio, el avechucho insolidario y ventajero, debe recurrir a pedirle ayuda a sus viejas víctimas.
Y parece que no, pero sí: el libro de Zweig le cambia la vida a varias personas a lo largo de la obra, o sea que le discute algo de protagonismo a Huergo y a su ex-socio, que son los personajes que más aparecen y a los que Sampayo más desarrolla. Como suele suceder en los comics de la dupla, los sacudones políticos de nuestro país aparecen magistralmente reflejados, como para que el contexto enriquezca (o al menos enrarezca) la historia más chiquita, más íntima, que sucede puertas adentro.
El dibujo de Muñoz, como de costumbre, desafía la comprensión humana. No se puede concebir que el tipo vuele y experimente tanto y aún así logre mantener un hilo narrativo perfecto y sin fisuras. Con su expresionismo pasado de rosca y ese pincel mágico que hace bailar a personajes, fondos, globos y letras una danza inimaginable por cualquier otro autor, Muñoz recrea lugares, épocas, climas, estados de ánimo muy distintos entre sí y acierta siempre. La escena en la que Huergo alucina con la caída de un piano sobre su némesis es tan maravillosa como desconcertante. ¿Qué es eso? ¿Qué hace ahí? ¿Y cómo puede estar tan bien dibujada, encima en un estilo que parece una caricatura del que usa Muñoz en el resto de la obra? La viñeta en la que vemos el rancho de Don Cosme en la noche de su muerte es para recortarla, enmarcarla y colgarla en un museo. Y así un montón. Realmente no se puede creer lo que hace el genio del claroscuro en las páginas de El Libro.
Bueno, acá están de nuevo los grossos, sin retomar a Sinner ni a sus personajes secundarios, sin adaptar obras literarias, ni contarnos la biografía de ningún músico. El Libro es una historia 100% original, apasionada y apasionante, contada como sólo ellos saben hacerlo. Vale la pena de verdad y –por supuesto- hay que hinchar las bolas para que esto se edite en el país donde nacieron los autores y donde transcurre la historia de Huergo, el ajedrez y el libro.

8 comentarios:

Eloy Santillán dijo...

tiene muy pero muy buena pinta habrá que conseguirla

Anónimo dijo...

Porque no se edita esto aca?

Anónimo dijo...

Andres, que opinas del Wednesday Comics, tengo el tp, y se la re banca,..... es demoledor...

Andres Accorsi dijo...

Primer Anónimo, esto no se edita acá porque los editores o no lo conokcen, o creen que no se va a vender. O sea, tienen un tumor fecal en el cerebro.
Segundo Anónimo, de Wednesday me gustan casi todas las historias, pero no el formato. Ojalá algún día se reedite en un tamaño más chico y menos lujoso, así me lo compro.

gonzalo dijo...

Una vez se intento con billy holyday, que también es muñoz/sampayo. No se que paso pero esa editorial creo que no saco nada mas, no se si vendió poco o el proyecto editorial en si fracaso. Es raro que no editen obras como esta, entiendo que embarcarse en alack sinner pueda ser riesgoso, porque son muchos libros, pero hay cosas que no tienen porcentaje de error, como el libro de gardel. No lo leí, así que no puedo hacer un juicio artístico, pero editorialmente hay que ser muy malo para no publicarlo con éxito localmente.

Martin Maldonado dijo...

YA QUE SABES TANTO PORQUE NO TE PONES A EDITAR VOS ESTAS COSAS ??? O TENES UN COCODRILO EN EL BOLSILLO Y NO TE GUSTA LOS RIESGOS ???

z dijo...

A mi Billie Holliday mucho no me gustó pero esto pinta muy bueno. Pero La Revisteria no lo tiene y no lo veo en scan, asi que a joderse!

Andres Accorsi dijo...

El Libro lo compré en una comiquería de Capital, estimado Z. O sea que no es imposible.
En cuanto al comentario de Martín, me hace acordar a cuando Niembro dice "Qué mal pateó ese corner Ortega" y el hincha de River le contesta "¿Y por qué no lo pateás vos?". Hay gente para todo muchachos. Algunos están más o menos capacitados para editar, otros estamos más o menos capacitados para opinar acerca de cómo se edita. Hoy yo estoy apostando por un proyecto editorial (el de Freakshow) que se concentra en publicaciones SOBRE historieta y no incluye la edición de historietas. Pero sí hay muchos que se dedican a eso, y no se entiende cómo ninguno se juega con maestros de esta envergadura. Gracias a mi labor como distribuidor, yo tengo un diálogo fluído con muchos editores y a todos les quemo la cabeza para que editen este material. Algunos, de vez en cuando, me dan bola.
En cuanto a la editorial que publicó Billie Holiday, no es exactamente una editorial. ES un emprendimiento de mi amigo Germán D ´Agostino, pero encarado en forma unipersonal y en los ratos libres, por eso no sacó nuevos títulos, a pesar de que BH vendió muy decentemente. Pero parece que en cualquier momento vuelve, porque tiene un par de títulos contratados y hasta se hizo cargo de algunos de los libros de Horacio Lalia que dejó sin editar Thalos cuando se fue al descenso.
Finalmente, me parece que la idea de M&S es que los dos tomos de Carlos Gardel los publique una editorial grossa. O sea que no hay muchas chances de verla editada por alguno de los pequeños sellos que están agitando el panorama local.